Tu final me incluía a mi, que lo hacía mi final.
Cuándo y cómo paso me pregunto?
Si tus besos eran igual de intensos, tus labios
me llevaban al delirio como tantas veces,
era pallpable la urgencia en ti por poseerme,
por besarme, por tenerme en alma
y cuerpo...
Qué pasó entonces?
Por qué no sentí el adiós o la mentira de nuestro
futuro...
Que haré con mis besos que quedaron pendientes...
Qué haré sin tus besos que eran el motor de mi vida...
Y la promesa de nuestro próximo encuentro, en eso
quedo, en promesa...
Cuándo paso?
Cuándo...
Afrodita
No hay comentarios:
Publicar un comentario